Autora: Mar Bernal Conde, fundadora del Instituto de Liderazgo y Sostenibilidad, Board Advisor.
La sostenibilidad está pasando de ser una consideración discrecional para convertirse en un imperativo estratégico en las agendas de los consejos de administración. Este cambio se debe tanto a la creciente presión legislativa como al convencimiento propio de las organizaciones y las demandas de la sociedad civil. Estas últimas abogan por una gestión y administración basadas en parámetros como la transparencia, la conducta ética y las prácticas sostenibles, que anteriormente pasaban desapercibidos.
Los criterios Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG), también conocidos por sus siglas en inglés ESG, han evolucionado para formar parte integral de la toma de decisiones estratégicas a nivel de consejo. Estos criterios ya no están limitados a iniciativas de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), sino que son componentes fundamentales que influyen significativamente en la competitividad y supervivencia futura de una organización.
En esta era de madurez en ASG, es crucial que el enfoque evolucione del mero compromiso al cumplimiento tangible. Los consejos deben asegurarse de que sus compromisos en ASG se traduzcan en estrategias accionables y resultados medibles. Esta transición es más que un deber fiduciario; es un imperativo estratégico que exige una recalibración de los modelos de gobernanza y los marcos de toma de decisiones. Requiere el establecimiento de métricas claras e Indicadores Clave de Rendimiento (KPI) que permitan tanto monitorizar como evaluar el desempeño en ASG de la organización.
Como factores clave para el éxito en la Transición ASG, cabe destacar:
1. Convicción de pasar Del Compromiso a la Acción: Los compromisos iniciales, a menudo manifestados en declaraciones de intenciones o políticas corporativas, ya no son suficientes. Los órganos de administración ahora deben garantizar que estos compromisos se traduzcan en acciones concretas y resultados medibles.
2. Trazabilidad como Piedra Angular: Para asegurar la efectividad de la estrategia, es crucial establecer métricas y KPIs claros que puedan monitorizar y evaluar el desempeño ASG de la organización. Los miembros del gobierno deben insistir en que los equipos de dirección establezcan métricas claras. Estas métricas proporcionan una base sólida para informar a los accionistas y otros grupos de interés, satisfaciendo tanto las demandas de transparencia como las expectativas de desempeño.
3. Interpretación de las Demandas de los Grupos de Interés: La efectividad de cualquier estrategia ASG está vinculada a su alineación con las expectativas de los grupos de interés. Este alineamiento requiere un proceso continuo de diálogo y retroalimentación. que permita a la organización adaptarse a las cambiantes demandas sociales, ambientales y de gobernanza. En este contexto, la interpretación precisa de las necesidades y expectativas de los grupos de interés se convierte en una habilidad fundamental para cualquier consejero.
4. Navegar el Cambio Regulatorio: La legislación evoluciona rápidamente y los riesgos a los que se enfrentan las organizaciones no son solo legales sino también reputacionales (con un efecto negativo inmediato y difícil de resarcir). En un entorno en constante cambio, es esencial estar proactivamente informados y adaptar las estrategias ASG para cumplir con las leyes y regulaciones más recientes.
En conclusión, para los consejos de administración, los criterios ASG son más que una iniciativa de cumplimiento o un ejercicio de relaciones públicas. Son un imperativo estratégico que exige un cambio de enfoque del compromiso al cumplimiento. Este cambio requiere una visión clara, métricas medibles y un fuerte compromiso para interpretar y responder a las demandas de los grupos de interés.
En un mundo cada vez más centrado en la sostenibilidad, el cumplimiento efectivo de los objetivos ASG se ha convertido en la nueva métrica de éxito para las organizaciones que aspiran a liderar en sus campos.